“¡Perfecto!”

Entre la montaña y pueblos notables, la cabaña de Mireille y Alex es ideal para los peatones como para los visitantes que desean evitar las multitudes durante la noche.

La habitación cómoda y espaciosa, abierta en un porche para los huéspedes que puede admirar la vista de las montañas y el hermoso jardín. Es también es comido tanto abundante y refinado, ya que todo es preparado por Mireille, que hace que incluso su pan, delicioso como sus yogures, sus atascos, sin dejar de mencionar sus excelentes pasteles - lo suficiente como para sostener un día productos enteros, con la satisfacción de comer local y orgánicos.

La guinda del pastel, Mireille y Alex son adorables, y tuvimos el gran placer de hablar con ellos. Ellos conocen su región y excelente asesoramiento, además de ser apasionado. En definitiva, un hogar excepcional.

Una de las favoritas para nosotros también!